De qué se escribe cuando lo único que se anhela es la muerte
Los personajes van y vienen entre palabras e imágenes
Un autor se desespera frente a una hoja en blanco
Un nuevo romance aparece
Un nuevo corazón se prepara para hacerse añicos
Pero de qué se escribe cuando se cuestiona uno sobre la misma existencia
La existencia del ser
De un ser cual personaje que existe solo mientras esté en nuestras mentes
Pero si lo olvidamos
Alguien siquiera se acordaba de Juan Preciado
En ese intento creo fallido de cumplir su promesa
Obvio que no nadie lo hacía ni siquiera yo hasta este momento
Y ahora que lo recuerdo solo pienso en su muerte
En su inexistencia mejor dicho
La que procede del olvido
La que obtendré yo en el futuro
La que motiva a los artistas científicos empresarios a buscar la trascendencia
La falsa modestia en la finitud del ser
Y la pregunta persiste
Qué escribir
Sobre qué hacerlo
Un yo lírico que deambula en sí mismo
Y que en la búsqueda de un fluir de consciencia
Se encuentren los pensares enamorados que hasta entonces no se habían visto jamas
Pero no lo hacen
El esquizoide ser se presume quebrado
La realidad teñida por todo aquello que engloba el pasado
Se vuelve indefinible
Una tautología propia del existir del narrar del sentir
La lluvia recorre textos en abriles
El sol parpadea en la noche
La llama se aviva
La tormenta se disuelve
Las hojas de un árbol perenne comienzan a desprenderse
Desarmándose de todo lo que tenga sentido
Y la muerte Merece acaso mi atención
Un par de zapatos se acomodan en el recibidor
Una cuerda se tiesa con la labor que le depara
Un personaje humano se decide a acabar con su historia
De qué se escribe cuando lo único que se anhela es...
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